Desde 2016, la Fundación Human Rights Campaign ha estado trabajando con los principales empleadores y multinacionales para promover la inclusión y la igualdad LGBT en los espacios laborales mexicanos a través de HRC Equidad MX: Programa Global de Equidad Laboral, el primer programa de HRC en América Latina. Trabajando de la mano de ADIL, una de las firmas consultoras de diversidad e inclusión más importantes de México, HRC ha establecido una herramienta líder de evaluación comparativa que califica la inclusión LGBT en los espacios laborales en todo el país.

En su quinto año, el programa pionero ha cambiado la forma en que las empresas y multinacionales mexicanas abordan las prácticas de diversidad e inclusión en el lugar de trabajo. Desde su inicio, el programa ha experimentado un crecimiento y éxito sobresalientes: en el año inaugural de la encuesta, 32 empresas obtuvieron las mejores calificaciones, entre ellas PEMEX -- la petrolera estatal de México y uno de los empleadores más grandes de América Latina. Dicho número llegó a 69 en 2018 y a 120 en la edición 2019 donde contamos con la participación de 36 empresas con sede principal en México. El año pasado, el programa reconoció a un número récord de 212 empresas con el sello de “Mejores Lugares para trabajar LGBT” de la Fundación HRC.

A puertas del quinto lanzamiento de la encuesta, HRC conversó con los socios implementadores de HRC Equidad MX, Francisco Robledo y Fernando Velázquez sobre sus experiencias y el futuro del programa.

Francisco Robledo y Fernando Velázquez, socios implementadores de HRC Equidad MX

¿Cómo le hicieron para ir de cero a más de 200 empresas en menos de cinco años?

Con años de experiencia trabajando en consultoría de diversidad e inclusión relacionada a la comunidad LGBT y el sector laboral, y el apoyo de multinacionales estadounidenses que lideran estos esfuerzos, el momento para lanzar Equidad MX se nos hizo perfecto. En 2014, Ciudad de México fue la sede del primer congreso de prácticas inclusivas LGBT y la red de empresas incluyentes, Pride Connection,se lanzó el mismo año. La estrecha relación económica entre EE. UU. y México ayudó a moldear la forma en que las empresas estadounidenses interactúan con sus colegas mexicanos y brindar la misma experiencia inclusiva para todos en las operaciones diarias.

¿Cuáles son algunos de los desafíos que ha experimentado al implementar este trabajo en México?

La inclusión LGBT se ha convertido en una práctica familiar para las empresas en México, ya que tenemos algunas de las legislaciones más avanzadas de América Latina de no discriminación, sin embargo, el desafío sigue siendo ponerlas en práctica en la vida cotidiana de la comunidad, especialmente en los espacios laborales. Durante la fase inicial del programa, uno de los desafíos más latentes fue la ausencia de líderes emergentes, abiertamente LGBT.

¿Qué tipo de impacto ha tenido el programa en la vida diaria de la fuerza laboral LGBT?

Estamos orgullosos del progreso y el cambio positivo impulsado por HRC Equidad MX, pero somos conscientes de que el trabajo pendiente por lograr la plena igualdad e inclusión de los trabajadores LGBT. La mayoría celebra la inclusión de su centro laboral como un lugar seguro donde pueden ser ellos mismos y así alcanzar su máximo potencial profesional sin distracciones. A pesar de los avances y mejores prácticas en el ambito laboral, hay muchas áreas de oportunidad en las que las empresas pueden impulsar una igualdad e inclusión aún mayor y mejor para sus colaboradores, especialmente para la fuerza laboral transgénero y de género no binario.

¿Cuáles son algunas de las expectativas para la quinta edición?

El crecimiento ha sido tan rápido en nuestros primeros cuatro años que para mantenerlo necesitamos toda la ayuda disponible de las empresas participantes, así como de líderes corporativos y de la sociedad civil. Cada día nos encontramos con que más empresas, dentro de estas cada vez más empresas mexicanas, están interesadas en participar del programa, pero su punto de partida está más lejos en relación al primer grupo de empresas que ya llevan trabajando la igualdad LGBT durante algunos años. Buscamos continuar expandiendo nuestro trabajo más allá de la Ciudad de México e impulsar nuestro crecimiento.

¿Qué desafíos y ventajas plantea la nueva era del teletrabajo?

El mayor desafío que hemos visto es entender el lugar de trabajo como un “lugar seguro”, lo que para muchos significaba el espacio físico de la oficina versus la oficina virtual, donde muchas veces los miembros de la comunidad no pueden ser ellos mismos. Estas situaciones surgen cuando los trabajadores LGBT viven en hogares con familias que desconocen sus identidades o que no les apoyan. La falta de interacción social crea un estrés adicional para los trabajadores, especialmente en lo que se refiere a la salud mental y emocional. Por otro lado, y como socios implementadores, el teletrabajo nos ha permitido llegar a un buen número de empresas radicadas en todo el país.

Para más información sobre nuestro trabajo en México visite hrc.im/SoyEquidadMX o este enlace para ver más de nuestro Programa Global de Equidad Laboral.